sábado, 11 de octubre de 2025

ALBORES O EL ROSTRO SIN VELO DE LAS TROVADORAS




LA COMTESSA DE DIA


DE ALEGRÍA Y JUVENTUD ME SACIO

De alegría y juventud me sacio

y alegría y juventud me sacian

porque mi amigo es el más alegre,

por lo que yo soy graciosa y alegre;

y ya que con él soy sincera,

bien pretendo que conmigo sea sincero,

que nunca de amarlo me abstengo,

ni tengo corazón para hacerlo.


Mucho me place, desde que sé que es el más valiente

aquel que más deseo que me posea,

y ruego a Dios que le dé felicidad

a aquel que primero lo trajo hacia mí;

y no crea a ninguno de los que le censuran,

salvo a quien le advierte

que se recibe a medida

de lo que se ha hecho.


Una dama que mire el buen valor,

bien debe poner su intención

en un caballero valiente y cortés

desde que conoce su valor;

y que ose amarle abiertamente:

porque de una dama que ama sin esconderse

los valerosos y los valientes

no dirán más que bien.


Yo he escogido un hombre valioso y cortés,

cuyo valor mejora y aumenta,

generoso, recto y prudente,

que tiene juicio y sensatez.


Le ruego que me crea,

y que nadie pueda hacerle creer

que yo he cometido jamás falta hacia él;

y no encuentro en él ningún defecto.


Amigo, vuestro valor

los valientes y los valerosos conocen,

por eso yo os suplico darme,

si os agrada, vuestra protección.


A CANTAR VOY DE LO QUE NO QUISIERA

Ahora deberé cantar de lo que no querría,

tanto me lamento del que soy amiga,

pues le amo más que a cualquier cosa en el mundo;

pero no valen ante él ni piedad ni cortesía

ni mi belleza ni mi valor ni mi juicio,

porque soy engañada y traicionada

como sucedería si fuera poco agraciada.


Me conformo pensando que jamás y de ningún modo

cometiera equívoco hacia vos, amigo,

sino que os amo más de lo que Seguis amó a Valensa,

y me agrada venceros en amor,

amigo mío, porque sois el mejor;

sois orgulloso conmigo en las palabras y en los modos,

mientras que os mostráis amable con todos.


Me sorprende cómo hacia mí vuestro corazón se muestra duro,

amigo, por lo que tengo razón para dolerme;

no es justo en absoluto que otro amor os aparte de mí,

sea lo que sea lo que os diga o conceda;

¡y recordad cuál fue el inicio de nuestro amor!

El señor Dios no quiera

que sea mía la culpa de la separación.


La noble virtud que habita en vuestro corazón

y el alto valor que poseéis me intimidan,

pues no conozco dama, cercana o lejana,

que, dispuesta a amar, no sea atraída por vos.

Pero vos, amigo, tenéis tanto juicio

que bien debeis reconocer la más perfecta;

y acordaros de nuestro pacto.


Deben ayudarme mérito y nobleza

y la belleza y aún más la sinceridad de ánimo,

por ello os mando allá donde moráis

esta canción, que sea mi mensajera;

y quiero saber, mi gentil y bello amigo,

por qué sois tan altanero y cruel conmigo:

no sé si por orgullo o mal talante.


Mas quiero que le digas, mensajero

que a muchos ha dañado el exceso de orgullo. 


ANGUSTIA GRAVE HE PASADO

Angustia grave he pasado

porque tuve un caballero,

y quiero que, para siempre, se sepa

cómo lo amé sin medida.


Ahora me veo traicionada

ya que mi amor no le di

y así viví en gran dolor

En el lecho y también vestida.


A mi caballero bien quisiera

tener desnudo en mis brazos una noche

y que él sintiera plenitud

aunque yo solo fuera su almohada;

pues más entregada me tiene

Que Floris a Blancaflor:

le doy mi amor, mi corazón,

mi juicio, mis ojos y mi vida.


Hermoso amigo, amable y bueno,

¿cuándo os tendré en mi poder

para yacer con vos una noche

y daros una noche de amor?

Sabed que mi deseo es grande

de teneros en lugar de mi marido,

siempre que me concedierais

hacer cuanto yo quisiera.


EL GOZO CORTÉS ME DA FELICIDAD


La alegría cortés me da felicidad,

por ella canto más gozosamente

y no me produce pesar

ni me causa ninguna preocupación

saber que quieren mi mal

los falsos y viles envidiosos,

y sus palabras malévolas no me atemorizan:

al contrario, soy dos veces más dichosa.


No tienen de mí atención alguna

los envidiosos maledicentes,

porque ninguno que esté de acuerdo con ellos

puede ser honrado;

ellos se parecen

a la nube que se expande,

por la que el sol pierde sus rayos;

yo no amo a la gente villana.


Y vosotros, celosos maledicentes,

no creáis que yo estoy dudosa,

o que alegría y juventud me desagradan,

por el hecho de que el mal os debilite.



No hay comentarios:

Publicar un comentario